Así describió al “apagón cultural” que se produciría si los fondos específicos del organismo fueran a parar al presupuesto general. Exhortó a apoyar el proyecto que dispone la prórroga de la especificidad por 50 años.

La representación en Río Negro del Instituto Nacional del Teatro (INT) cuestionó sobremanera el peligro que se cierne sobre la autonomía económica y financiera del organismo, si no se prorroga por 50 años la vigencia de los fondos específicos para organismos de cultura. Laura Vinaya advirtió: “Claramente, estamos frente a la posibilidad de perder un derecho, como es el acceso a la cultura”.

Desde Luis Beltrán, localidad donde reside, Vinaya también se manifestó en contra del llamado “apagón cultural”, que amenaza no solo al INT, sino también al Instituto Nacional de la Música (INAMU); el Instituto de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA); y a la Comisión Nacional de Bibliotecas Populares (CONABIP). “Nos afecta a todas las instituciones del Estado nacional que contribuyen al desarrollo de las actividades culturales en todo el país”, resaltó.

La actriz y docente le dijo a El Cordillerano que “el INT trabaja muy federalmente y muy territorialmente porque, a través de la autonomía de su presupuesto, permite que los recursos estén divididos equitativamente en las diferentes regiones del país. Entonces, Patagonia como región tiene un mismo presupuesto que otras y eso hace que, realmente, el teatro se desarrolle federalmente”, insistió.

Según Vinaya, “lo que más preocupa de esta situación es que haya habido un Gobierno que haya fijado caducidad a la ley de financiamiento, por lo que se interpreta que hay una mirada del Estado según la cual no hace falta que esos fondos se distribuyan de manera federal”, cuestionó. “De esto claramente tenemos que salir, a través del proyecto del diputado (Pablo) Carro (Frente de Todos), que presenta una prórroga para la vigencia de las asignaciones”.

La coyuntura “es preocupante, porque a veces uno sobreentiende que los derechos conquistados no se pueden perder, pero, claramente, estamos frente a la posibilidad de perder un derecho, que es el acceso a la cultura”, destacó la teatrera. “Se verá afectada sobre todo la población, porque todos los fondos que se invierten en el desarrollo teatral, a través de las salas y los grupos, no son para estos destinatarios finales, la destinataria final es la población en cada lugar del país, para que pueda acceder a una experiencia teatral, a una experiencia escénica”, aclaró.

No solo es el caso del INT, “lo mismo pasa con el resto de las instituciones: la finalidad última es la comunidad, el pueblo, con su derecho al acceso a las actividades culturales. En esta dimensión, estamos frente a la posibilidad de un avance muy grave sobre un derecho que, como todos, se conquistó a través de luchas, que, a veces, llevaron consigo muertes”, resaltó Vinaya.

Si bien en la geografía provincial no se produjeron movilizaciones de importancia, como la del miércoles último en Buenos Aires, “desde el INT hemos organizado reuniones informativas en todo el país, alentando a la organización y a la discusión”, señaló la directiva. “Hemos acompañado algunas actividades que se desarrollaron hace poco menos de un mes, para visibilizar la problemática”, relató.

Claro que no alcanza. “Estamos sosteniendo una agenda de reuniones con diputados y senadores, tratando de conseguir el acompañamiento para la aprobación del proyecto que ya está en el Congreso desde hace un año. Lo que pasa es que ha cambiado su conformación (el Poder Legislativo) y tuvo que volver a analizarse en la comisión. Obviamente, siempre estamos en comunicación con la comunidad, que según entiendo, es la que seguramente sabrá organizarse y movilizarse para el fortalecimiento de la lucha que se está llevando adelante en este momento”, se esperanzó Vinaya.