El 22 de abril pasado El Cordillerano visitó a la querida Alicia, una canillita que toda su vida caminó las calles de nuestra ciudad vendiendo diarios para ganarse la vida. De manera inmediata parte de la comunidad se conmovió por la situación en la que vivía y comenzaron a suceder cosas inesperadas. Dos grupos de laburantes, de gente que aunque con el bolsillo chico, tiene el corazón enorme, se unieron para darle una mano.

La idea de la nota era simplemente que le llegara ayuda para intentar mejorar su casita, lo que nunca se pudo imaginar era que le harían un departamentito a estrenar.

Este nuevo grupo solidario se denominó Amar y ayudar a Alicia, algunos comerciantes hicieron importantes descuentos en materiales de construcción, otros directamente los donaron. La empresa Valdiviezo Construcción y mantenimiento puso a disposición, con la aceptación general de sus empleados, la mano de obra. Además, muchos vecinos y vecinas depositaron dinero en la cuenta habilitada.

El día que abrió las puertas de su casita a El Cordillerano

Así de mágica se activó esta rueda solidaria y hoy, a menos de cuarenta días de esa primera nota, comienza a cambiar rotundamente la calidad de vida de Alicia. Alrededor de las 15 horas comenzaron a llenar de hormigón la platea, primer paso para dar forma a un sueño que ella ni siquiera se había animado a tener, la emoción de la canillita es muy difícil de expresar con palabras.

El lugar donde todavía vive tiene dos paredes que afirma con cajas para que no se le caigan encima, como sistema eléctrico algunos cables colgando y una sola bombilla de luz sin la llave para su encendido.

Eso ya se lo acondicionaron de manera provisoria, al igual que el tema de la calefacción ya que utilizaba el horno de la cocina a gas para darse un poco de calor. Sabiendo del peligro que esto representaba, dejaba todas las noches la puerta semiabierta para evitar inhalar monóxido.

El departamentito tendrá una cocina, un baño, dormitorio y un pequeño living, con las instalaciones realizadas por matriculados de gas, luz y agua. Hermosas ventanas por donde entrará el sol y otras comodidades básicas que mucha gente lo tiene y quizás, no lo valora.

El agradecimiento de Alicia desde el momento de la nota era enorme, sus llamados constantes hicieron saber de la felicidad de sentirse tan querida por mucha gente. Mucho mayor fue su emoción al saber lo que estaban planeando simplemente, pensando en su bienestar.

Aquéllos que deseen colaborar pueden hacerlo por estos medios

Está feliz y quiere hacer llegar a cada una de las personas involucradas, un gracias gigante y como dice ella “no me dará la vida para agradecer todo lo que me están dando”. Se lo merece simplemente por ser una mujer trabajadora, por caminar nuestras calles durante tantos años con frío y llegar a su casita donde no variaba mucho la temperatura, siempre con una sonrisa enorme.

El equipo que se puso al hombro la construcción del departamentito para Alicia quiere agradecer a Ariel Valdiviezo, Lolo Sur Automotores y a JL Herramientas. Asimismo al Escuadrón de Gendarmería Nacional, al Comandante Alfonso y al Sargento Suarez.

A Patricia Calderón,  Jefa del Departamento Servicio Centro Atómico Bariloche, al Gerente Coordinador de la misma institución, el contador Sebastián Buscemi. A Cortinas Roller y Aberturas TMC. A todo el grupo de trabajadores de la empresa Valdiviezo, 20 hombres que creen siempre en algo mucho mejor, a Antonio,Damián, Santiago y a cada uno que está haciendo posible este sueño.