Aunque no hay tratamientos ni vacunas específicas para la viruela del mono, los brotes pueden controlarse con la vacunación contra la viruela, según la Organización Mundial de la Salud (OMS). Al respecto de precauciones, el doctor Carlos Barclay (infectólogo) sostuvo: “Nosotros ahora estamos muy sensibilizados por el tema del covid, con lo que pasó en los últimos años, y esta es una situación, por lo que sabemos hasta ahora, absolutamente diferente. Es muy probable que se vaya apagando el número de casos en las próximas semanas. Es un virus de la familia de la viruela, la gente más joven no conoce esa enfermedad. Nosotros los más veteranos nos vacunamos, en Argentina se vacunó hasta 1979/1980 contra la viruela y se dejó de vacunar en el mundo por una decisión de la OMS, cuando la viruela fue erradicada y no hubo más casos en el mundo”. El covid –dijo– tiene una suba de contagios “más que leve”.

El especialista ratificó: “Es un virus emparentado con el virus de la viruela que se conocía en la década del 50 porque producía enfermedad en los monos y en algunos roedores de África. Estaba limitado al continente africano, hay allí dos formas que se ven en el centro de ese continente y otra en la zona occidental. En el año 2003 por primera vez hubo casos fuera de África, llegó una importación de roedores a Estados Unidos, esos roedores estuvieron en contacto con perritos de la pradera y ahí hubo contacto con humanos, quizás por mordeduras,  por primera vez fuera de África”.

A través del programa “Agenda”, que se emite por El Cordillerano Radio (93.7) y que conducen Antonio Zidar y Daniela Lucero, explicó: “Fue una cuestión de mascotas, hubo en la historia de la infectología casos similares, hubo contagios de importación de simios que fueron llevados a distintos países para su presentación, con ese brote de 2003 en Estados Unidos se prohibió la importación de roedores por el peligro que ello implica”.

También señaló: “Existieron esporádicos casos fuera de África, nunca un brote como el que estamos viendo ahora, esto llamó la atención desde un principio. Aparecieron esparcidos por distintas partes del mundo, pero el epicentro de los contagios fueron algunas reuniones importantes que hubo en Europa, en las Islas Canarias, en Bélgica y en Madrid y, a partir de ahí, gente que participó de todas esas reuniones viajó a distintos países y fue esporádicamente esparcido por distintos lugares, puede ser que aparezcan contactos secundarios cuando vuelvan a sus países y contagien en otros lugares”.

Sobre el caso que apareció en Argentina, aclaró que el paciente “tuvo contacto entre el 28 de abril y hasta mediados de mayo en España. Apareció aca y puede tener un período de incubación entre 7 a 14 días, se puede extender hasta 21 días, se convive con eso. Ayer o anteayer en el microscopio electrónico se observó que hay partículas que son compatibles con este virus del mono”.

Aseguró Barclay: “Es contagioso igual que las enfermedades respiratorias, como la gripe, como el covid, en estas dos variantes de las distintas zonas de África, este corresponde a la viruela del mono que se ve en la zona occidental de África, que es menos contagiosa y menos grave, tiene menos mortalidad, la mortalidad oscila entre un 1 y un 10%, mas cercano al 1% y el contagio es mucho menor, además se necesita contacto estrecho por bastante tiempo para contagiarse, puede ser a través de gotitas respiratorias, es menos eficiente (en cuanto a los contagios) que el covid y que la gripe” y agregó que se trasmite en forma más “frecuente de piel a piel, cuando surgen lesiones, parecidas a la varicela, son como unas vesículas que tienen agua y como un líquido purulento adentro que salen primero en la boca, después en la cara y luego se van desparramando por el cuerpo”.

Con respecto a si es necesario vacunarse, mencionó que “hay vacunas disponibles, pero los que están vacunados contra la viruela, como los que se han vacunado hasta la década del 80, se piensa que tienen una gran protección contra esta forma. Hay dos vacunas más modernas que están disponibles y licenciadas en Estados Unidos. No hay para vacunación masiva, son para grupos de riesgo, como las personas que trabajan en laboratorios manipulando el virus y a lo mejor se utilizan para un contacto estrecho, pero no está programada una vacunación masiva. De cualquier manera, siempre hay temor a que el virus haya cambiado y se haga más transmisible. Hay un informe muy reciente de la OMS que indica que el virus no ha mutado, es probable que esto se apague en las próximas semanas. La viruela era un enfermedad grave que mató a millones de personas en la historia del ser humano y tenía un 30% de mortalidad, es una mortalidad enorme, era altamente contagiosa. Esta aparición es muchísima más acotada”.

Asimismo, refirió el médico que en la actualidad “hay un montón de reservorios en el mundo, se han estudiado cuevas con murciélagos que albergan centenares de otros virus parecidos al covid. El punto es el cambio que hubo en los últimos tiempos con respecto de la invasión de seres humanos a esos reservorios de animales, donde antes no teníamos contacto y eso unido a la globalización puede hacer que una enfermedad de este tipo, en dos horas, donde una persona se transporta desde la República Democrática del Congo a la ciudad de Madrid, pueda trasmitir este tipo de infecciones, incluso cuando se realiza sexo sin preservativo puede haber una trasmisión de cualquier tipo”.

Suba “más que leve” de covid

Sobre la suba de casos covid, mencionó: “Mirando las cifras, el aumento es más que leve, en los reportes semanales aumentó más de un 200% en las últimas tres semanas en los casos que se detectan. Hay una gran cantidad de personas que, cuando se cambia la política de testeos, no están siendo diagnosticadas. Hay una cuarta ola en Argentina, los casos nuevos que se están viendo en general son más leves, no están aumentando las internaciones y eso es por el efecto de las vacunas que hemos recibido. Hay que recordar que Ómicron, Ómicron 2 y Ómicron 4 son las que están circulando en Argentina. Por ejemplo, si uno ya tuvo Ómicron 1 en enero puede volver a repetir Ómicron 4. No hay inmunidad por haber tenido Ómicron 1 y no da inmunidad tener dos dosis de vacunas nada más. Por ello es importante completar las recomendaciones del Ministerio para todas las personas que estén incluidas en las tres dosis, una de refuerzo, eventualmente la segunda dosis de refuerzo (la cuarta) en algunos grupos como los mayores de 50 años o los que tienen algún grado de inmunocompromiso. Dos dosis contra Ómicron no alcanza y aún hay un 50% de personas que en el país no tiene la tercera dosis”.