Para el diputado Domingo, "se presta un servicio muy malo”

El Transporte Público de Pasajeros (TUP) mantiene el precio del boleto con valores altos en el interior el país en comparación con aquello que abona un ciudadano del Área Metropolitana Buenos Aires (AMBA), como consecuencia que el Estado nacional aporta en subsidios más dinero hacia dicha zona. En la Ciudad Autónoma de Buenos Aires el boleto pasa de un costo de $18 a $25,20, pero hay ciudades del interior donde los pobladores pagan mucho más caro el pasaje. En Bahía Blanca transportarse por la zona urbana sale $76, en Mar del Plata $74, en Bariloche $62 (por ahora porque hay un pedido de aumento de la empresa), en Santa Fe, Rosario, Córdoba $68,50. Son insólitas diferencias entre 'unitarios y federales’, una ciudad central con una realidad distinta con respecto al interior. El diputado nacional Agustín Domingo, del bloque de Juntos Somos Río Negro (JSRN), indicó que “nosotros presentamos un proyecto de Ley en la Comisión de Transporte de Diputados que apunta a la raíz del problema. Entendemos que ese manejo unitario que hace el gobierno nacional, no importa el gobierno que esté, apunta a competencias que no son de Nación” y agregó: “si la empresa sigue recibiendo subsidios para cubrir sus costos no se va a preocupar para que viaje más gente”. 

Al respecto explicó que “el transporte urbano, interurbano de pasajeros es una competencia municipal en la mayoría de los casos, en algunos casos provincial, sin embargo el Estado Nacional avanza con la billetera, como tiene más recursos de los que necesita para cumplir con las funciones que le manda la Constitución, el Estado Nacional se mete en cosas que no le corresponde y hace lío”. 

A través del programa “Agenda” que se emite por El Cordillerano radio (93.7) que conducen Antonio Zidar y Daniela Lucero refirió que “es muy difícil que un grupo de funcionarios del Ministerio de Transporte de la Nación, sentados en Buenos Aires, entiendan cuál es la realidad del TUP de Bariloche o de Salta o el de Mar del Plata. Priorizan con esta mirada centralista a los servicios de transporte público del AMBA. Hoy tenemos un fondo para asistir el TUP del AMBA, de Buenos Aires y otro fondo para el interior”. 

Con seguridad señaló que “el síntoma del problema está en la diferencia del precio del boleto, pero no nos tenemos que quedar con eso porque muchos salen a pedir más plata para el Fondo del Interior y que todo siga igual. Si no sacamos la raíz del problema, que es la intromisión de Nación en cosas que no le corresponden, vamos a seguir igual”. 

Asimismo sostuvo que “nosotros lo que decimos es que Nación siga poniendo la plata, porque tiene más plata y por eso tiene la oportunidad de hacer estas cosas, pero que ese dinero sea enviado directamente a las provincias y que eso sea manejado por una entidad local del transporte. Las provincias y los municipios y que la mirada este puesto no en cubrirle el costo a las empresas, sino en incentivar un mayor uso del TUP, en función de la cantidad de pasajeros que cada uno transporte”. 

Consideró Domingo que “acá también hay una trampa en creer que en el interior viaja menos gente arriba del colectivo, entonces también hay que mirar la cantidad de kilómetros que el transporte recorre, cubrís los costos y no es así. Nosotros lo vemos en Bariloche donde los colectivos van llenos, no con menos gente que en la ciudad de Buenos Aires, entonces la deficiencia del uso es muy grande, la diferencia en el precio está dada por el mayor subsidio que tienen en Buenos Aires respecto del interior”. 

Sobre que la gente viaja muy mal, pero por algún motivo conviene seguir dedicándose al Transporte de Pasajeros, refirió que “es una necesidad, lamentablemente se presta un servicio muy malo. Deberíamos tener un sistema que tiente a la gente a viajar en colectivo, que deje el auto, pero para eso el foco debe estar puesto, tanto por el municipio que es el poder concedente como la empresa tienen que tener como único objetivo transportar más gente”. 

El diputado aseguró que “al empresario siempre le digo que si el 80% de sus ingresos van a venir de un subsidio que le va a garantizar que puede pagar los sueldos, que puede pagar el leasing de las unidades, que puede pagar el gas-oil no se va preocupar por llevar más gente para cubrir sus costos y obtener ganancias. Ahí está la clave, si no modificamos de raíz ese sistema perverso que tenemos vamos a seguir con estructuras de transporte ineficientes que no le va a preocupar ni al concesionario, ni al concedente modificar la ruta para hacer un sistema que maximice el transporte y la utilización de las unidades. Ahí está la clave, porque el hecho de tener un subsidio implica una señal donde claramente el Estado tiene que intensificar el uso”. 

Por último, el congresal Agustín Domingo mencionó: “Si diseñamos mal lo que hacemos es una señal equivocada, un tema que no funciona. No alcanza con dar subsidios, hay que darlo bien para que los incentivos y las señales estén bien puestas. Sin duda es necesaria una mayor asistencia financiera. Tenemos que lograr un sistema más equitativo, que funcione mejor”.